Nunca conocí con más detalles el estado o disposición de su vivienda. Primero jugué un poco con el glande hinchado y amoratado por la acumulación de riego sanguíneo. Videos Porno Pero no solo era yo la que avanzaba hacia la raíz de su tronco, sino que Antonio también asumió un rol que le animaba a follarme la boca, lentamente, sin apenas ansias, pero muy decidido a hacerme fondo. Esta vez con más cautela, evitando emitir el más mínimo ruido.Así se presentaba el tema: Antonio se estaba haciendo una paja de las buenas, a juzgar por sus leves jadeos pero briosos movimientos. Pero tampoco me molesté en conocer un poco mejor al propio Antonio. No sé cómo iba a mirar a partir de ahora a Antonio en mis paseos diarios por delante de su atril de conserje, pero ya me preocuparía de eso con el tiempo. Los tranquilos bamboleos le permitieron mantener su propio ritmo, pero entonces hice uso del abrazo manual en su rabo para marcar un tope en la penetración oral, ya que empecé a sentir ciertas arcadas como resultado de una inflamación exagerada que intuí previa al orgasmo.
