Sobra decir que entró como si nada. Me sujetaba a su cuello para no caerme al suelo. Porno gratis Era un beso húmedo, grosero, su lengua se movía en mi boca como si le perteneciera. Le dije que el director de la obra era un loco y que nos hacía trabajar un montón. Era su puta, él lo sabía y yo también. Tu cuerpo me ―pierde puta…―Ahhh, diosss…―Shhh, nos van a oír…Decía esto mientras sacaba su enorme polla de mí. El bulto que se notaba era increíble, y yo estaba como loca por notar de nuevo su polla en mi boca. Era su puta, él lo sabía y yo también. El placer que me estaba haciendo sentir era increíble. Era un beso húmedo, grosero, su lengua se movía en mi boca como si le perteneciera. No ahora, no aquí…―Olvídate de todo un rato, ¿vale?―Quítame las manos de ahí, por favor…Estaba claro que conocía mis puntos débiles como nadie… ni siquiera Santi conseguía encenderme con tanta rapidez. Nunca creí que fuera posible poder llegar al orgasmo sin que me toquen, sólo por estar chupándole la polla a un tío, pero Dios, estaba a punto de correrme, por oir sus gemidos, por ver su cuerpo, por cómo me trataba.
