Eran bien duras y sus pezones estaban como piedra. Porno Dijo y se fue adentro.Yo quedé sorprendido por sus palabras y sin poder creer lo que había pasado. Esta vez, tomo mi cabeza con una mano y me devolvió un tremendo beso, para moverse como loca sobre mis dedos.Con una mano busco mi pija y me masturbaba al ritmo de sus movimientos. Lo fue enterrando de a poco. Se metió el pequeño en la concha y gemía sin parar.-Chupame la pija.-Me tratas como a una puta Pedro…-Sos mi puta. Se notaba que no llevaba corpiño.-Buen día Pedro.-Hola Nati, buen día.-¿Te sirvo un café?-Por favor. Vos lo dijiste, cuando quiera, donde quiera, por donde quiera.-Si Pedro.Ella tomo los consoladores, los guardo y se fue a lavar. Ella se empezó a mover haciendo que mis dedos entren totalmente en su concha. Esta vez, tomo mi cabeza con una mano y me devolvió un tremendo beso, para moverse como loca sobre mis dedos.Con una mano busco mi pija y me masturbaba al ritmo de sus movimientos. Natalia, no voy a volver hasta media tarde, no prepares comida para mí.-Bueno, como quieras, si no te la caliento cuando volves.-No te hagas problema.-Yo voy a aprovechar para salir a correr un poco.
