“No, no quiero ponerle los cuernos a mi marido” le decía a José cuando empezaba a recorrer mi cuerpo con lascivia. Porno gratis Con el tiempo hubo muchas oportunidades más, me besó las chiches y lamió mi vientre, bajando hasta hacerme venir sólo con la lengua. Lo monté y lo cabalgué como posesa hasta que caí rendida. Mis 55 años soltaban ganas de quinceañera. “Es más pecado tener un hijo fuera del matrimonio”, contestó mientras me rompía el himen. José se hincó poniendo las rodillas bajo mis axilas y puso su exangüe verga en mi boca. Tuve una hija que parece un clon mío, incluido lo caliente, pero José fue terminante con ella cuando intentó seducirlo. En total, fueron con cinco hombres antes de casarme, todas las veces con condón, pero repetimos varias veces.La mejor de ellas fue con un señor casado, a quien aquí llamaré José, con quien hacíamos una labor social de educación a los jóvenes. José se hincó poniendo las rodillas bajo mis axilas y puso su exangüe verga en mi boca. Con el tiempo hubo muchas oportunidades más, me besó las chiches y lamió mi vientre, bajando hasta hacerme venir sólo con la lengua. Sí, ante el mismo con quien lo había cometido. Tuve una hija que parece un
