La siesta se prolongó más allá de lo pensado y nos despertamos cuando se ponía el sol.¡Se nos va el colectivo de la tarde!, gritó Mateo.Rápidamente juntamos todo, lo metimos en las mochilas y corrimos hasta la parada de micros del balneario. Porno hd Él me metía la mano por atrás debajo de mi bermuda, buscando mi culo con la mano abierta y su dedo medio fue abriéndose paso en mi ano dilatado con tantos polvos. Van a ir más cómodos ahí y la terminal queda a diez cuadras, tienen tiempo de sobra.-¡Es más caro!, protestó Mateo.-Dale pibe, no es tanta la diferencia. Nico le contestó que había también para él. Tras pocos minutos se corrió Nico en el interior de Mateo y luego de unos momentos lo levantó y me lo sentó sobre mi poronga a punto de explotar. Tras pocos minutos se corrió Nico en el interior de Mateo y luego de unos momentos lo levantó y me lo sentó sobre mi poronga a punto de explotar. No dejé que Nico guardara su pija, que seguí sobando hasta que el micro entró en un parador, cuando me llamé a sosiego, resoplando agitado.-Te debo una, me susurró Nico.Al reanudar el viaje y apagarse las luces, volvimos a lo nuestro, pero invirtiendo los
