Pero pocas como la de Rafa. Comencé a masturbarme con más frecuencia. Videos Porno La sensación fue indescriptible. Una especie de dolor agudo se transformó al instante en algo placentero. El tipo encendió un cigarro y me lo pasó tras darle una calada. Todo se compensa a con un extraño sex appeal y una polla exageradamente grande. El tipo era un magnífico amante. Sentía como su capullo llegaba al fondo de mi coño. Le agarré los huevos, de tamaño considerable también, y comencé a juguetear con ellos al tiempo que mi cabeza iba y venía por el tronco. Mi lubricación era más de la habitual, igual que mi excitación. En silencio abandona.os la oficina y salimos a la calle. Mirándole de reojo y con media sonrisa acerqué mi mano y le acaricié el paquete de manera disimulada. El tipo era un magnífico amante. Mi cavidad bucal no era suficiente para deja te trozo de carne. Al parecer, en una ocasión se fue con una tía a la que no le cabía. Y otra leyenda decía que una pareja se desmayaba cuando se la metía hasta el fondo. Sin dejar de mirar a los ojos de aquel tipo, le 3wcupí en el capullo antes de continuar mamando:-Vaya guarra que eres, joder.Cada insulto hacía que
