La tome de la cintura y la acerque a mí mientras seguíamos besándonos. Le di la vuelta y acaricie sus torneadas piernas, se sentían tan suaves. Porno Al final llegue a una conclusión: debía terminar con todo esto. Se levantó ligeramente y con su mano dirigió mi miembro para que entrara. Acerque mi mano a ella para hacerlo, pero sus palabras rondaron mi cabeza. Sus dedos eran tan suaves.—No puedes tocarme —me dijo obligándome a mirarla tomando mi barbilla con su mano libre—. Pero aun así había estado mal.Cuando salí de la habitación aún no se habían ido. Decidí no arriesgarme y regrese mi mano a la cama, de todos modos disfrutaba lo que hacía.Después de unos minutos sacó mi miembro de su boca y lo sostuvo con firmeza.—Ahora veo porque este es el juguete que todas se están peleando —comentó con una sonrisa y yo no pude hacer nada más que temblar por el escalofrío—. —pregunte extrañado de verla sola sin ninguno de nuestros amigos que la acompañara.—La verdad me aburrí —me dijo con una sonrisa y mis ojos se desviaron al pequeño lunar sobre su boca—. Lo hice como si tuviera no hubiera comido en mucho tiempo. Dos, verte haciéndolo hizo que se me antojara y tres, realmente se veía
